Conversión de Impresoras Fiscales a Impresoras Para Factura Electrónica
Desde que se presentó la Ley 72 del 27 de septiembre de 2011, tanto los comerciantes como los consumidores experimentaron cambios en su diario vivir al aparecer las nuevas impresoras fiscales, las cuales venían a revolucionar los negocios de retail y comercios en general. Anteriormente cuando se hizo el cambio a impresoras fiscales, se extendió el plazo para adoptar la nueva reglamentación, sin embargo, a lo largo del tiempo cada comercio logró adaptarse y tener en funcionamiento su dispositivo fiscal. El sistema de los equipos fiscales consiste en almacenar de manera segura la información de las transacciones dentro de la Memoria Fiscal con el fin de mejorar el proceso de recaudación de impuestos y estandarizar el formato de las facturas en el país.
Diez años han transcurrido y la Dirección General de Ingresos (DGI) avanza en el proyecto de Facturación Electrónica, la cual ya varias cadenas de comercios han implementado. Esta implementación consiste en no depender de la impresora fiscal para guardar las transacciones y recurrir a los servicios web de la DGI para que las facturas vayan digitalmente desde el comercio a la DGI y al cliente final vía email, reduciendo el gasto de papel en muchos de los casos.
Esta nueva modalidad, según estipula la Ley, será de adopción voluntaria, no obligatoria y representa para muchos comercios una solución a varios de los inconvenientes que se tienen actualmente con las Impresoras Fiscales, debido a que sus funcionalidades las hacen más propensas a otro tipo de fallas que no tienen las impresoras “normales” o No Fiscales.
Para el empresario, las preguntas más comunes en este punto serían “¿Debo comprar otra impresora más? ¿Qué hago con la impresora fiscal que ya tengo?“, lo que inmediatamente nos hace pensar en la inversión no planificada, justo en tiempos en los que la situación económica a causa de la Pandemia del Covid 19 dicta que es necesario ahorrar lo más que se pueda.
Afortunadamente para los comercios que estén interesados en migrar de un sistema de facturación Fiscal a un sistema de facturación Electrónica, es posible reutilizar la impresora fiscal a través de un proceso de remanufactura realizado por Posper Panamá, con la finalidad de utilizarla como una impresora de tiquetes, o como se les llama ahora, “Comprobantes Auxiliares de Factura Electrónica“.
Este proceso involucra varios pasos:
- La impresora fiscal debe poder convertirse en “no fiscal”. La mayoría de las impresoras fiscales están basadas en otro modelo de impresora que no necesariamente es fiscal. Algunos de los equipos en los que se ha realizado esta operación son:
- Epson TM-H6000III
- Epson TM-T88V
- Bixolon SRP-350II
- Bixolon SRP-810
- Star HSP7000
- Star TSP650
- Verificación en laboratorio, para asegurar que las impresoras convertidas funcionen con el sistema de facturación electrónica.
- Desactivación fiscal, proceso administrativo para “dar de baja” el equipo y que la DGI esté al tanto de que ya no se va a utilizar como impresora fiscal.
- Las interfaces disponibles para transformar la impresora pueden ser:
- Serial RS232
- Paralelo
- USB
- Powered-USB
- Ethernet
Nuestro equipo de trabajo cuenta con la capacidad, herramientas y equipos necesarios para ayudarle a su empresa a ahorrar cantidades significativas de dinero en remanufacturar sus impresoras fiscales, aprovechando así al máximo la inversión realizada en las mismas y reduciendo la cantidad de desechos electrónicos que se generan.
Para mayor información y para cotizar proyectos no dude en contactarnos a través de cualquiera de nuestros canales.
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